Un llamado al Sistema de Emergencias 911 había alertado a los empleados policiales sobre una violencia de género que se estaba registrando en un domicilio de calle Corrientes. Un equipo de la comisaría que se encontraba en las cercanías realizando tareas de prevención se dirigió al lugar y, al llegar, se entrevistaron con una mujer quien manifestó que mantuvo una discusión con su pareja pero no deseaba radicar denuncia.
En ese momento se presentó el supuesto agresor a quien se le planteó que había un llamado en el que denunciaban violencia de género, situación que también negó. Cuando le solicitaron los datos filiatorios, al ser verificados a través del Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (SIFCOP), este arrojó que tenía pedido de captura por una causa de lesiones agravadas por el vínculo.
El prófugo fue puesto a disposición de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual y de Género que avaló el procedimiento policial.