Tras la denuncia presentada el 24 de junio de 2024 a la Dirección de Patrimonio del Ente Cultural, sobre el hallazgo de restos cerámicos y óseos en el terreno perteneciente a la familia Córdoba, en inmediaciones de El Chorro (El Cadillal), se convocó a la Comisión de Rescate Arqueológico del Instituto de Arqueología y Museo, para dar inicio a las tareas de intervención pautadas según la normativa vigente.

Tras una breve entrevista con miembros de la familia, se realizó una inspección ocular del área (galería en construcción), donde se observó la presencia de una urna que contenía restos óseos en su interior. La misma ya se encontraba expuesta en su totalidad y los materiales del interior habían sido removidos (sedimentos y restos óseos).