Debido a la pandemia, incrementaron las consultas por los trastornos como ser insomnio, pánico y ansiedad. El director de Salud Mental, Walter Zigner, se refirió a la situación de la población afectada por trastornos mentales en relación a la discontinuidad de tratamientos producto de la pandemia.

Zigner, en una entrevista desarrollada por la radio LV12, se refirió a la creación de equipos de integración terapéutica comunitaria, con lo que se busca trabajar a partir de la inclusión social de acuerdo a la Ley de Salud Mental de la Nación en donde se tienen que dar todas las herramientas para que las respuestas a los trastornos severos se dé a nivel territorial y se evite el traslado a los dos hospitales de salud mental de referencia en la provincia que son: Hospital de Clínicas Nuestra Señora del Carmen y Hospital Juan Manuel Obarrio de Salud Mental.

“Todos los departamentos pueden ofrecer servicio de psiquiatría en el interior provincial. Una de las dificultades que tenemos es la continuidad del tratamiento de los pacientes con padecimientos mentales. Muchas personas externadas van a sus domicilios pero no continúan con la medicación y los controles médicos. Estos equipos buscan garantizar la continuidad del tratamiento brindado por los hospitales de referencia y articular con los centros asistenciales locales”, declaró.

“El Siprosa tiene su Área Operativa de Alta Montaña que asiste con medicina general, asistentes sanitarios y enfermería. Ahora tenemos un equipo interdisciplinario para pronosticar y dar tratamientos”, declaró.

También dijo que “en alta montaña es otra forma de atención. Personas con una cultura distinta donde nosotros tenemos que adaptarnos para dar continuidad a la atención”.

A su vez, informó que en los poblados de las cumbres “estamos viendo personas con trastornos mentales severos, con retraso mental, que requieren un abordaje territorial. Hasta el momento no tuvimos necesidad de internar a nadie. Sí llevamos medicación a través del Siprosa”.

“En pandemia se producen distintos tipos de reacciones. En algunas personas estas reacciones son más acentuadas que en otras. Tenemos mucha consulta de ansiedad, estrés, insomnio, pánico y trastornos obsesivos. Estas reacciones son esperables aunque muchas veces no son tenidas en cuenta a tiempo por las personas para evitar trastornos más severos”.

Sabemos que, en 2030, “el principal motivo de discapacidad serán los trastornos mentales, como lo fue en 2010 con los trastornos depresivos. Para la pospandemia nos estamos preparando porque sabemos que las consultas por trastornos mentales acentuados irán en crecimiento”.