El ministro de Salud Pública, Luis Medina Ruiz, acompañado por el secretario ejecutivo médico del SIPROSA, Miguel Ferre Contreras, encabezó el encuentro de autoridades en el que se avanzó sobre estrategias sanitarias para Tucumán.

Al respecto, el titular de la Dirección de Epidemiología, Rogelio Calli, expresó: “Se hizo una evaluación de las enfermedades estacionales, básicamente de las respiratorias luego del invierno y con la llegada de la primavera. Vimos la circulación de microorganismos, de virus que han generado siempre alerta, movilización y una demanda de atención en los sistemas de salud”.

El especialista subrayó que muchas de estas enfermedades son inmunoprevenibles, como por ejemplo el COVID y el Sarampión. En este marco, aclaró que la provincia cuenta con altos porcentajes de cobertura y eso muestra la respuesta de la población para vacunarse y evitar enfermedades.

Cabe destacar que, entre los días 23 al 29 de octubre (semana epidemiológica 43) se notificaron 14 casos, sin reporte de pacientes fallecidos.

Salud femenina

Por su parte, la referente del programa de Cáncer de Mama, Estela Esquivel, presentó en la Sala de Situación la cobertura del programa que dirige y del cual llevan un 66 por ciento. “Esto quiere decir que, las mujeres gracias a todas estas estrategias que hemos implementado desde el Ministerio de Salud Pública, se realizaron su mamografía; hablamos de pacientes del grupo de riesgo compuesto por mujeres entre 40 a 70 años”, aportó.

Y añadió: “Más allá de la campaña en octubre, desde el Ministerio trabajamos durante todo el año. El objetivo del programa es que estas mujeres que están en el grupo de riesgo, se realicen la mamografía para hacer una detección precoz de la enfermedad y que se puedan curar en un 90 por ciento de los casos, a los cinco años”.

En Argentina, detalló la profesional, hubo una reducción sostenida de la mortalidad desde el año 2001 hasta el 2020: “Reducir la mortalidad por cáncer de mama no es fácil, pero es gracias a todas estas estrategias de prevención y concientización que se hace desde los programas de salud. Concientizamos a todas las mujeres, incluso ahora en colegios primarios y secundarios desde muy pequeñas, para que esto sea un hábito en la familia, en el trabajo, que deben realizarse sus chequeos para cáncer de mama y de útero. De hecho, el cáncer de cuello de útero tiene una prevención primaria, una vacuna que se coloca a todos los niños y niñas a los 11 años. Esperamos que esta próxima década que viene, se reduzca esta patología de útero debido a la vacunación en este grupo etario”.