Luego de un gran trabajo intersectorial se concretó la capacitación y selección de los 12 chicos que formarán parte de un proyecto de inserción laboral.

Al respecto, la jefa del servicio de Rehabilitación del Hospital de Clínica Nuestra Señora del Carmen, licenciada en terapia Ocupacional Ada Pucheta, comentó: “Esto es algo que esperábamos hace mucho tiempo, que necesitábamos dentro de la sociedad. Como terapeuta ocupacional, creo que le ponemos todas las fichas a esta instancia última de la rehabilitación que es la inclusión laboral”.

“Nos sentimos muy gratificados en que nos hayan convocado como colaboradores para contribuir a las mejoras en el desempeño de estos pacientes, que van a ser los protagonistas, ya que van a brindar un servicio a la comunidad. Ester proyecto, se vino armando, se fue capacitando a los chicos y surgió por parte del señor Pepe Ramón que ya viene con experiencia en la temática”, indicó.

Nosotros, agregó, desde otro lugar, con otro tipo de experiencias, tratamos de sumar y concretar los aportes necesarios, contribuir a esta iniciativa tan importante para las personas, para la comunidad, para la provincia y para los equipos de salud.

En tanto, la licenciada agregó: “Esto es un proceso donde cumplimos todas las etapas de inclusión laboral. Iniciamos con la entrevista, selección de postulantes, capacitaciones y lo llevamos a la práctica en situaciones reales de la vida cotidiana con ensayos y error, buscando estrategias y realizando algunas adaptaciones para que las personas con discapacidad cuenten con un buen desempeño ocupacional en las tareas que les toca cumplir”.

Se abre el bar inclusivo, relató, que quedó determinado como espacio de encuentro, donde los seleccionados tienen que cumplir requerimientos según las competencias y puestos de trabajo que existen en el lugar. En esta oportunidad serán mozos, cajeros, ayudantes de cocina; fuimos como definiendo los puestos, determinando las tareas, trabajando en lo que es el compromiso y la responsabilidad.

Finalmente, aseguró: “Todo esto surge de un trabajo intersectorial, interinstitucional, donde se necesitan todas estas articulaciones para hacer posible la inclusión. En el hospital participaron todos los servicios, además de las familias que contribuyeron, por lo que es una labor de todos. Para que sea inclusivo, necesitamos colaboración de la sociedad, desde lo mínimo, la aceptación, la empatía, que es lo que necesitamos más que nada”.