El Hospital de Avellaneda inaugura un nuevo consultorio de terapia ocupacional.
El Hospital de Avellaneda inaugura un nuevo consultorio de terapia ocupacional, un espacio que busca responder a la creciente demanda de pacientes con diversas condiciones. Con la participación activa de los residentes de terapia ocupacional, se están implementando innovadoras técnicas de rehabilitación que benefician a pacientes de todas las edades.
El Hospital de Avellaneda continúa avanzando en su oferta de atención especializada. La doctora Patricia Medina, subdirectora del establecimiento, destacó la inauguración de un nuevo consultorio dedicado a la terapia ocupacional, que está ofreciendo respuestas concretas a los pacientes con necesidades específicas. "La verdad que ha sido un logro para nosotros", comentó la doctora. Este nuevo espacio tiene como objetivo atender a personas con discapacidades, pero también a quienes requieren asistencia en su rehabilitación, como los pacientes de reumatología y aquellos que padecen enfermedades como la artrosis o los efectos de un ACV.
El consultorio de terapia ocupacional del Hospital de Avellaneda forma parte de una innovadora residencia que comenzó hace casi tres años en la provincia. Aunque la terapia ocupacional es una disciplina relativamente nueva, con solo 30 profesionales en el sistema provincial, el hospital ha logrado crear un espacio de formación que promueve la inserción de los residentes en diferentes servicios. La residencia cuenta con 6 residentes, en el hospital, bajo la supervisión de un jefe de residentes y un director, quienes se encargan de coordinar las actividades. Actualmente, los residentes atienden pacientes dos veces por semana, aunque se espera aumentar la frecuencia a medida que la residencia crezca.
El trabajo de los residentes va más allá de las consultas. En su día a día, los terapeutas ocupacionales trabajan de manera integral, atendiendo a pacientes tanto ambulatorios como internados. "Nuestro objetivo principal es promover la autonomía del paciente, ya sea que padezca o no una discapacidad", explicó Daniel Quiroga, licenciado en terapia ocupacional y residente del hospital. En este contexto, los terapeutas utilizan diferentes técnicas de adaptación para mejorar la calidad de vida de los pacientes, ayudándolos a recuperar habilidades básicas de la vida cotidiana, como comer, vestirse o moverse con independencia.
El consultorio, que actualmente atiende los lunes, jueves y viernes por la tarde, está recibiendo pacientes de diversas especialidades, especialmente de reumatología, y ha comenzado a expandir sus atenciones a pacientes con condiciones como el autismo o problemas de salud mental. Los residentes no solo trabajan con los pacientes, sino que también brindan acompañamiento a las familias, lo que fortalece el enfoque integral de la atención.
Uno de los avances más destacados es la fabricación de prótesis personalizadas. Los residentes han adquirido los materiales necesarios para diseñar y fabricar utensilios adaptados a las necesidades específicas de cada paciente. "Por ejemplo, pacientes con enfermedades reumatológicas que no pueden sujetar ciertos objetos, como cubiertos, reciben prótesis hechas a medida para facilitarles el uso diario", explicó Medina. Este tipo de trabajo permite que los pacientes se reincorporen a sus actividades cotidianas, brindándoles una mayor calidad de vida.
Por su parte, Quiroga subrayó la importancia del enfoque interdisciplinario en el tratamiento de los pacientes. "Trabajamos de manera conjunta con otros servicios del hospital, como el de rehabilitación y salud mental, para ofrecer una atención integral y personalizada", indicó. Este modelo de trabajo ha sido muy valorado por los pacientes, quienes destacan no solo la eficacia de los tratamientos, sino también el trato cálido y cercano de los residentes.
La incorporación del consultorio de terapia ocupacional en el Hospital de Avellaneda representa un importante avance en la atención a pacientes con diversas condiciones. A través de la residencia, el hospital no solo brinda formación a los futuros terapeutas ocupacionales, sino que también asegura que los pacientes reciban un tratamiento integral y de calidad.