"Un mundo mejor es posible" se titula la obra con la que se cerró el ciclo de actividades anuales.
El Aula de Reumatología de la Escuela de Pacientes, con el apoyo del Ministerio de Salud Pública, a cargo del doctor Luis Medina Ruiz, presentó su obra de teatro y canto coral en la Casa del Bicentenario. La creación colectiva, titulada "Un mundo mejor es posible", resalta valores como la empatía, la solidaridad y el bienestar integral, impulsando el aprendizaje y la autoestima de los pacientes.
El pasado sábado, como parte del cierre de las actividades anuales, el Aula de Reumatología de la Escuela de Pacientes presentó una obra de teatro y canto coral en la Casa del Bicentenario. Esta iniciativa, enmarcada dentro de los lineamientos del Ministerio de Salud Pública, consistió en una creación colectiva titulada “Un mundo mejor es posible”. La obra surgió a partir de los talleres artísticos realizados con las docentes Alejandra Muntaner y Batiah Adler de Chazal, y abordó temas fundamentales como la empatía, la solidaridad y el bienestar integral de los pacientes.
En la oportunidad, la doctora Alba Pieroni, directora del Hospital Avellaneda, comentó: “Como cierre de año, a través de una obra de teatro y canto, los pacientes del aula de Reumatología mostraron todo lo que pueden hacer, cómo pueden acompañarse, cómo pueden ayudarse mutuamente para que todos estemos un poco mejor todos los días”. Pieroni destacó que las actividades de la Escuela de Pacientes, como el teatro, la actividad física y los talleres, tienen un impacto positivo en los participantes, permitiéndoles olvidar, aunque sea por un momento, el dolor asociado a sus enfermedades. Además, enfatizó la importancia de la energía positiva que se genera entre los pacientes, un objetivo central de la escuela.
Por su parte, la doctora Alejandra Pereyra, referente del aula de Reumatología en el Hospital Avellaneda, compartió el origen de esta actividad: “La idea surgió como una propuesta más en el aula, incorporando el trabajo motor junto con la profesora Alejandra Muntaner, que también forma parte del equipo del Hospital Avellaneda. Comenzamos con un taller de teatro, al que luego se sumó el canto coral con la profesora Batiah Adler de Chazal, quien eligió una canción representativa para el aula”. Pereyra explicó que los propios pacientes fueron quienes idearon y decidieron el contenido de la obra, incluyendo el título “Un mundo mejor es posible”, que refleja tanto el dolor físico como el emocional, además de las dificultades motrices que enfrentan algunos de los pacientes.
La participación de todos fue un reto, ya que el aula cuenta con un gran número de integrantes, pero el esfuerzo valió la pena. “Fue un trabajo arduo, pero se logró la integración de todos los pacientes, algo fundamental porque trabajamos también sobre la autoestima”, agregó Pereyra. La satisfacción de los participantes fue evidente, ya que muchos se fueron muy felices, compartiendo la experiencia con sus familias.
La doctora Pereyra también subrayó que este evento representa un cierre de año “original, creativo y diferente”, que no solo marca el final de un ciclo, sino que reafirma el propósito de la Escuela de Pacientes: promover el bienestar integral de cada uno de los participantes y fortalecer la reciprocidad en el aprendizaje con el equipo profesional.