Se encontraba desaparecida desde las 23 horas del 2 de septiembre pasado, cuando fue vista por última vez frente a su vivienda ubicada en la Ruta 306.
Los investigadores de la División Homicidios de la Policía trabajan intensamente en el esclarecimiento de la muerte de Ana María Carrizo, cuyo cuerpo fue hallado y luego reconocido por sus hijas en la tarde del lunes en un cañaveral de Los Bulacio, en el departamento Cruz Alta.
Las sospechas de los pesquisas apuntan a la expareja, con quien convivía la mujer, y a su actual novio. En las últimas horas de la noche, los efectivos de la División especial, dirigidos por el Subcomisario Daniel Montero, secuestraron los vehículos de los sospechosos en dos medidas de allanamientos ordenadas por el juez penal Dante Julio Ibáñez: un auto marca Renault 9 y una camioneta Ranger.
La mujer, de 64 años, se encontraba desaparecida desde las 23 horas del 2 de septiembre pasado, cuando fue vista por última vez frente a su vivienda ubicada en la Ruta 306, de Los Bulacio, departamento Cruz Alta. De acuerdo a los primeros datos, su actual novio fue la última persona que la vio con vida cuando la acompañó hasta el frente de su casa.
Desde ese momento, los efectivos de la Unidad Regional Este, supervisados por el Comisario Mayor Sergio Sobrecasas, iniciaron un intenso operativo de búsqueda, que incluyó rastrillajes por la zona y secuestros de prendas de vestir durante allanamientos que se realizaron durante la tarde del domingo.
Finalmente, alrededor de las 14 de este lunes, el cuerpo fue hallado en un cañaveral, ubicado a unos pocos kilómetros de su vivienda. Ahora el caso es investigado por los efectivos de la División Homicidios, a cargo de Diego Bernachi, junto al fiscal de Homicidios II, Carlos Sale.