El jefe de Policía dispuso que el agente de 27 años, que se desempeñaba como personal transitorio policial, sea desafectado de sus labores policiales.
En el mes de junio, gracias a un rápido procedimiento, un efectivo de la Policía de Tucumán fue aprehendido junto a tres hombres más con quienes intentó secuestrar a un taxista con el fin de extorsionarlo. Este jueves, las autoridades del Gobierno de la Provincia, del Ministerio de Seguridad y de Jefatura de Policía, firmaron su desafectación definitiva de la fuerza.
El jefe de Policía, Manuel Bernachi, dispuso que el agente de 27 años, que se desempeñaba como personal transitorio policial, sea desafectado de sus labores policiales tras haber permanecido en situación pasiva por proceso tras el hecho del que fue acusado, por tener el antecedente de una causa administrativa y judicial penal.
El hecho
Cerca de las 3 de la mañana del domingo 20 de junio, una persona llamó al 911 para avisar que en calle Necochea al 800, cuatro sujetos armados sacaron a la fuerza a un hombre del taxi que conducía y lo subieron a una camioneta Ecosport dorada. En el vehículo quedaron una mujer y una niña de tres años, familia del hombre secuestrado. Con la información aportada en la llamada, se logró identificar la patente de la camioneta y determinar que iba acompañada por un auto blanco.
“Inmediatamente se montó un operativo cerrojo con todas las dependencias policiales que estaban trabajando en la calle, y efectivos del Programa Cuadrantes de Patrulla lograron detectar los vehículos en calle Santa Fe, casi esquina Maipú, por lo que solicitaron apoyo y rápidamente se presentaron en el lugar varios empleados policiales que patrullaban la zona”, informó en ese momento el comisario inspector Jorge Dib, director General de Investigaciones Criminales, quien supervisó todo el procedimiento.
Al interceptar los vehículos, descubrieron que el conductor de la camioneta era policía federal y afirmó que estaba trabajando en un procedimiento junto a efectivos de la Policía de Tucumán. En el interior del vehículo iban tres hombres más: uno de ellos estaba esposado y otro era Oficial Subayudante de la policía, pero ninguno llevaba uniforme de las fuerzas de seguridad.
Por otro lado, en el auto Chevrolet Onix circulaba el empleado de la policía provincial con jerarquía de agente. “Se descubrió que esta banda liderada por el policía federal, quien estaba con licencia laboral por Covid-19, aparentemente había secuestrado al taxista para exigirle dinero, amenazándolo de muerte a él y su familia con armas de fuego”, agregó Dib.
Con la supervisión de la Unidad Fiscal de Delitos en Flagrancia II°, a cargo del fiscal Ernesto Salas López, secuestraron dos armas de fuego, un celular, un chaleco y una chapa identificadora policial de los dos efectivos de la fuerza tucumana de 26 y 27 años; un celular, una chapa y credenciales del Policía Federal de 32 años; y un móvil del civil implicado, de 27 años de edad.