En la semana de festejos por el bicentenario de la Policía de Tucumán se llevan a cabo numerosos actos y celebraciones con las cuales se busca homenajear a la institución y de las cuales participa tanto personal activo de la fuerza como efectivos ya retirados. Una de las figuras históricas que participó en la misa celebrada este martes en la Catedral, es el Comisario General retirado Guillermo Corbalán, uno de los primeros jefes de Policía egresados de la Escuela de Cadetes.

Para mí es un orgullo participar de este acto porque le debo a la Policía lo que soy. No soy mucho, pero todo se lo debo a la repartición”, expresó el ex jefe de Policía de 92 años, quien rememoró que esta vocación le brindó nuevas oportunidades al poder conocer y aprender de la Policía de Grecia, Turquía e Israel, una vez retirado de su cargo. 

Guillermo ingresó a la Escuela de Policía en el año 1950 cuando tenía 19 años, acorde a sus recuerdos en esa época se ingresaba solo con sexto grado, lo demás se aprendía en la institución. Durante ese periodo pudo recibirse de taquidactilografo mientras trabajaba.  Cuando le tocó cumplir con el servicio militar recorrió muchos pueblos del Litoral del país, colaboraba con los oficiales del ejército y años más tarde lo reincorporaron a la repartición donde culminó siendo Comisario General. Posteriormente fue nombrado Jefe de Policía en diferentes gobiernos y ya retirado se desempeñó como profesor en la Escuela de Policía donde enseñaba materias referidas al derecho procesal y técnica sumarial.   

“El policía aprende cuando estudia, participa de congresos y lee. Aprende mucho de la universidad de la calle. Creo que el empleado policial debe tener aún más contacto con la gente, tienen que visitar a los habitantes y preguntarles cómo ven el accionar de la Policía y si tienen sugerencias para que la fuerza preste un servicio eficiente”, señaló Corbalán resaltando el actual desempeño de los efectivos y la vocación de los mismos en el marco de los lineamientos que plantea el Ministerio de Seguridad a cargo de Eugenio Agüero Gamboa.  

Asimismo contó que en sus tiempos libres se dedicó a escribir libros basados en sus experiencias. Uno de ellos es “Mitos y leyendas” en el que sus principales notas están relacionadas a lo que implica la Policía. “Una de mis notas explica el significado de la figura del gallo que lleva la Policía en su chaqueta. Esta forma viene de la antigüedad y hace alusión a la vigilia que hace el animal del campo que al cantar anuncia el comienzo del día, y que con él se acerca la seguridad. Es por eso que este fue el signo elegido para la seguridad, ya que para la sociedad significa que la Policía está siempre alerta y están resguardados”, concluyó Corbalán.