La confusa situación comenzó cuando un menor se presentó en la base de la patrulla motorizada para informar a los agentes que a unos 100 metros de allí, en una zona de matorrales, había un hombre que munido de un machete y un látigo lo amenazó.

Al llegar al lugar mencionado, encontraron a un hombre muy ofuscado que al ver a los empleados policiales comenzó a insultarlos y se abalanzó sobre ellos con intenciones de lesionarlos. A pesar de la violenta situación los uniformados lograron reducirlo y trasladarlo a la Comisaría de Banda del Río Salí.

Una vez allí, se hicieron presentes los familiares del detenido, armados con machetes y látigos, quienes alteraron el orden en el lugar y también intentaron agredir a los agentes, por lo que fue necesario la presencia de más personal policial, a fin de restablecer el orden.

Finalmente, se puso en conocimiento a la Unidad de Flagrancia que ordenó el secuestro de los machetes y látigos, como así también convalidó la aprehensión del hombre por la causa atentado y resistencia a la autoridad, mientras que no se adoptaron medidas privativas de la libertad en contra de los familiares.