Luego de trabajos preliminares  para evitar daños colaterales al edificio del Convento de las Carmelitas Descalzas, finalmente se logró derribar un eucalipto de gran tamaño que comprometía la seguridad de los vecinos, como del centro religioso. El trabajo fue realizado por brigadistas de la Dirección de Defensa Civil Provincial.

El director de Defensa Civil, Fernando Torres, declaró: “La labor requirió tres días, ya que el eucalipto tenía 30 metros de longitud y estaba pegado a una tapia de cuatro metros. Ese árbol había causado cortes en la red de energía eléctrica. Las religiosas estaban muy preocupadas. Los primeros dos días, con la grúa de la Policía de Tucumán, bajamos parte de la copa. Ayer hicimos el derribe del tronco principal”.

Además, el funcionario dijo: “Trabajaron seis brigadistas. Se utilizaron motosierras de distinto tamaño y potencia, cuerdas y cuñas para darle dirección a la caída. El árbol tenía un diámetro de un metro y medio. El árbol estaba ladeado por sobrepeso hacia el lado de afuera. Gracias a la pericia del personal, al ser talado, cayó donde estaba planificado”.