Cerca de las cinco de la mañana, efectivos de esta Unidad Especial recibieron la denuncia de un hombre, quién les relató que mientras estaban celebrando una reunión familiar, fuera de su domicilio, desconocidos ingresaron a su casa y le sustrajeron un toro y una vaca de un corral ubicado en el fondo de la vivienda; la víctima también precisó que los cuatreros huyeron con dirección al este.

Con esta información un equipo se dirigió al domicilio para iniciar el rastrillaje y seguimiento de las huellas y rastros dejadas por ambos animales. De esta manera, llegaron hasta la localidad de Los Juárez, distante a 15 kilómetros. Ya en el monte y siguiendo el rastro de los pastizales, cerca de las 8 de la mañana, el personal policial encontró a los animales atados en un árbol y lastimados. En el lugar hallaron indicios de que finalmente serían faenados. 

Aunque no se encontraron rastros de los autores, los efectivos pudieron rescatar a los vacunos y restituírselos a su dueño en presencia de testigos hábiles. Asimismo, fueron secuestrados un lazo de tres metros y una linga de la misma medida. 

La supervisión general estuvo a cargo del titular de la Dirección General de Delitos Rurales y Ambientales, el comisario Luis Castaño y del subdirector del área, el comisario Ariel Galván.