Personal de Patrulleros del 911 acudió a los domicilios señalados por las denunciantes.
Durante el fin de semana, y en circunstancias diferentes, personal de la División Patrulleros 911 intervino en dos casos de violencia familiar en la que los efectivos auxiliaron a las víctimas y aprehendieron a los agresores.
Ambos hechos sucedieron en la noche del domingo. El primero de ellos tuvo lugar en un domicilio ubicado en barrio 11 de Febrero, de la capital, donde los uniformados fueron comisionados por el Sistema de Emergencias 911, ya que la damnificada denunció que su hijo de 36 había ingresado a la vivienda alterado, bajo los efectos de estupefacientes, y la estaba amenazando de muerte porque le exigía dinero, a lo que la mujer se oponía.
En tanto, el otro caso se suscitó en una morada de la zona de avenida Francisco de Aguirre, entre calles Bulnes y Castro Barros, donde la víctima solicitó la presencia policial, ya que su marido se encontraba alcoholizado y la había amenazado con golpearla y matarla.
Siguiendo el protocolo de actuación policial para el abordaje integral ante situaciones de violencia, los agentes de la Unidad Especial procedieron al resguardo de las víctimas, aprehendieron a los acusados y los trasladaron a las delegaciones policiales correspondientes desde las que se informaron los acontecimientos a las autoridades de la Unidad Fiscal de Violencia Familiar y de Género, que avaló las detenciones.
En esta ocasión, el accionar policial fue dirigido por el jefe de la División Patrulleros 911, Jorge Castro y supervisado por el director y subdirector de la Dirección General de Prevención Ciudadana, Damián Soria y Jorge Mastafá.