El ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, estuvo presente en la Escuela del Servicio Penitenciario, donde capacitaron a agentes en la utilización del nuevo armamento que será utilizado en Benjamín Paz y Delfín Gallo.
En la jornada de este martes, el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, estuvo presente en la Escuela del Servicio Penitenciario, donde capacitaron a agentes en la utilización de armas menos letales que serán usadas en los complejos penitenciarios.
En tal sentido, el titular de la cartera de Seguridad expresó: “me encuentro en la Escuela del Servicio Penitenciario donde los proveedores de las armas menos letales están explicándole a los agentes cuales son las virtudes con la que cuentan estas herramientas, como utilizarlas, como armarlas y desarmarlas, y como cuidarlas. Además, están capacitándolos”.
Asimismo, aseguro que el personal del Servicio Penitenciario contará con estas armas para trabajar en los Complejos Delfín Gallo y Benjamín Paz. Y, comentó: “un detalle muy importante es que Tucumán es la primera provincia en Sudamérica que compra armas menos letales en forma directa. Esto trae aparejada una mayor seguridad, y menos letalidad en caso de ser utilizadas en un tumulto entre las personas privadas de su libertad”.
A su vez, Guillermo Iglesias, Instructor de armas no letales, manifestó: “estamos realizando el curso de formación para los instructores y operadores de este tipo de armas, que tienen la característica de disparar proyectiles químicos y sólidos para incapacitar temporalmente a las amenazas que se presentan, eso significa que todos estos dispositivos están diseñados para salvar vidas”.
También, dijo que una de las características más importantes de estas armas es que genera la posibilidad de tener una gran distancia para poder neutralizar a una persona. Se puede disparar a 20 metros con mucha precisión, y hasta 53 metros de forma efectiva, e inclusive a mayor distancia utilizando una parábola.
“Todo esto ocasiona que no se tenga que llegar a un contacto cuerpo a cuerpo con la persona privada de la libertad, hasta que no sea estrictamente necesario. Hay muchas amenazas que no se puede resolver con un arma de fuego, es por esto que utilizamos este sistema”, cerró, Iglesias.