Sostuvo que “las vacunas no van a generar en este periodo una inmunidad que evite que circule el virus. En la reunión de gabinete de esta mañana, nos contaron que hay más enfermos en cantidad y en otras poblaciones como jóvenes y niños, con chicos internados con formas graves en el Hospital de Niños y en el Avellaneda, la situación está compleja y somos todos responsables”. Agregó que “en este contexto, el Estado tiene que estar más cerca de la gente más humilde y en ese sentido hay estrategias a nivel general como la seguridad alimentaria que está funcionando como la tarjeta Alimentaria o los comedores escolares con sus modalidades de viandas o módulos y eso está funcionando muy bien”. “Les pedimos a los vecinos que sean solidarios con las familias que están aisladas, no todos necesitan que el Estado les acerque alimentos pero sí que se les colabore con las compras o las gestiones y esto para todos los grupos sociales”, pidió. Además, manifestó que “el sector de Salud es rector en todo, en la prevención, en la atención y también en decirnos cuáles son las familias en riesgo social que tienen aisladas, y a través de ese listado que nos da la cartera sanitaria, podemos asistirlos con módulos de alimentos pero lo que necesitamos es enfermarnos menos”. Indicó que “precisamos que se enferme la menor cantidad de gente, que no nos enfermemos al mismo tiempo o con formas graves para que haya recurso humano suficiente para la atención”. Por otro lado, llevó tranquilidad en relación en las escuelas: “Los ministerios de Salud y Educación han hecho como un observatorio sobre el comportamiento del COVID en las escuelas en las ‘burbujas’ y menos del 0,8 por ciento están aisladas. La escuela es un lugar seguro, con protocolos que se cumplen, no es un lugar de contagio y muy protector para la niñez. Añadió que “la pandemia nos ha generado otras dificultades de salud, sociales o psicológicas”. Tarjeta Alimentar El ministro contó que participo ayer del conversatorio sobre la Tarjeta Alimentar a 15 meses de su lanzamiento, encabezado por el ministro nacional Daniel Arroyo y referentes de la Universidad Católica Argentina y su Observatorio de la Deuda Social, UNICEF, entre otros. “Mostraron que la tarjeta sigue una estrategia adecuada a través de estudios de investigación donde hubo comparaciones de grupos sociales similares y los que recibieron la tarjeta estuvieron mejor y no pasaron episodios de hambre”. Indicó que “la tarjeta está bien focalizada y la conclusión fue que sería más adecuado aumentarle los montos que incorporar nuevos grupos destinatarios”, cerró Yedlin. Por último, remarcó que “a través de la Tarjeta, llegan a Tucumán 7 mil millones de pesos al año que se vuelcan al consumo, al almacén del barrio, verdulero, etcétera”.